Sin embargo, se ve como un miembro de la seguridad del local comercial se le acerca y explica que no puede seguir en el lugar utilizando ese objeto, por lo que la acompaña hasta la salida.
Algunos clientes manifestaron que les parecía una broma de pésimo gusto, pues todos los países se encuentran acatando las medidas sanitarias y de emergencia decretadas por las autoridades para evitar el contangio del COVID-19.
“Nos parece pésimo, no es momento de bromas”, declaró un ciudadano.